Existen diversos problemas de visión, que se pueden presentar por múltiples causas como defectos en la forma y estructura del ojo, que dan lugar a los errores de refracción.
Entre los problemas de visión más frecuentes, tenemos:
- Miopía: dificultad para ver de lejos.
- Hipermetropía: dificultad para ver de cerca.
- Astigmatismo: los objetos son vistos distorsionados debido a irregularidad de la córnea.
- Presbicia: dificultad para leer debido a un envejecimiento del cristalino a partir de los 40 a 50 años.
- Defectos en la claridad de los medios: causados por opacidad a nivel de la córnea (cicatrices, inflamación, infecciones), opacidad del cristalino (catarata), traumatismos.
- Defectos en la circulación ocular: enfermedad de la retina por diabetes, hipertensión arterial, enfermedades de la sangre.
- Defectos en el nervio óptico: glaucoma por aumento de la presión ocular, neuritis, otras.
- Prematuridad o Envejecimiento: Retinopatía del prematuro, Degeneración macular relacionada a la edad.
Los tratamientos para estos problemas oculares dependerán del grado de afectación de la vista. Por ejemplo, una persona con presbicia, podría corregir su visión usando lentes de marco, de contacto o cirugía láser. Esta última opción será la única en el caso de un paciente con defectos en la claridad de los medios.
Una persona con defectos en la circulación ocular puede ser tratada con inyecciones intraoculares, láser o cirugía. Para los defectos en el nervio óptico, en cambio, se pueden tomar medidas variables que van desde la hospitalización hasta el manejo ambulatorio. En el caso de la prematuridad o envejecimiento, el tratamiento dependerá únicamente del compromiso de la enfermedad.
Si considera que tiene problemas de visión, acuda a un oftalmólogo. Este diagnosticará a tiempo cualquier padecimiento y le indicará el tratamiento adecuado para su enfermedad.
