Hasta los 45 años de edad aproximadamente, la forma del cristalino es capaz de cambiar. A medida que una persona envejece, las proteínas en el cristalino comienzan a descomponerse, tornándose la visión borrosa, formando la "Catara".
La mayoría de las cataratas están relacionadas con otros factores de riesgo como: Diabetes, Hipertensión Arterial, Obesidad, Tabaquismo, Lesiones o inflamaciones previas del ojo, Cirugía Ocular previa, Uso de Esteroides, Antecedentes Familiares, Prolongada Exposición al sol, que pueden favorecer al desarrollo de las mismas.
Así mismo, existen otros tipos de Cataratas Metabólicas (por otras enfermedades), Cataratas Congénitas (en los niños), Cataratas Traumáticas (por golpes en el ojo), y otras variantes. Las cataratas generalmente se desarrollan de manera lenta y sin dolor.
A continuación te comparto los principales síntomas de alerta ante la presencia de catara:
1. Sensibilidad al resplandor
2. Visión nublada, borrosa, difusa o velada
3. Dificultad para ver en la noche o con luz tenue
4. Visión doble
5. Pérdida de la intensidad de los colores
6. Ver halos alrededor de las luces
Las cataratas llevan a una disminución en la visión, incluso con la luz del día. La mayoría de las personas con cataratas tienen cambios similares en ambos ojos, aunque un ojo puede estar peor que el otro. Con frecuencia, sólo hay cambios visuales leves.
Mediante un examen oftalmológico completo, su médico diagnosticará si existe catarata y el grado de avance de la misma; por ello, es muy importante acudir al especialista al menos una vez al año para control de rutina